Es el núcleo urbano mayor de la Costa Brava. Limpio y cuidado, agradable en todos los conceptos, está situado en el centro de una hermosa bahía que cierra la escollera de un buen resguardado puerto. Su playa, típica y arenosa, está junto al fondeadero de los pescadores.
Centro importante de comunicaciones y de comercio de la Costa Brava, tanto en verano como en el propio invierno concurren en él miles y miles de turistas de todas partes del mundo. Ello hace que, a pesar de contar sólo 9.000 habitantes, presente la animación de una enorme metrópoli. A poniente de la bahía, la montaña de Sant Elm cierra el mar y forma los accidentes de Les Planetes,
Santa Rosaria, Sang-i- fetge y cobija la ermita de su nombre y que ha sido crisol de la tradicional vocación marinera de la población. Desde lo alto de Sant Elm, la vista se dilata sobre Tossa y, hacia el norte, más allá de Llafranc y Bagur. A 3 km de Sant Feliu de Guixols, se encuentra la amplia Playa de Sant Pol.
Sant Feliu de Guíxols: la ciudad vecina de Colera y sus atractivos turísticos
Imagínese estar en la pintoresca ciudad costera de Colera, rodeado de la impresionante belleza natural del Mediterráneo, pero querer explorar más allá de sus límites. ¿A dónde podría ir? La respuesta es simple: Sant Feliu de Guíxols, la ciudad vecina llena de joyas culturales y turísticas que merece la pena descubrir.
Situada a solo unos kilómetros de Colera, Sant Feliu de Guíxols es una ciudad histórica encantadora con una rica tradición cultural y gastronómica. Hay numerosos atractivos turísticos en la ciudad que pueden agradar a cualquier visitante, y aquí hay algunos ejemplos:
Su patrimonio cultural: Sant Feliu de Guíxols es una ciudad rica en patrimonio cultural y tiene muchas iglesias y edificios históricos que vale la pena visitar. Entre ellos, la Torre de las Horas, una antigua fortificación del siglo XIV; la iglesia del monasterio de Sant Feliu, un ejemplo impresionante de arquitectura románica catalana; así como la Plaza del Mercado, un lugar donde se puede respirar el ambiente local y hacer algunas compras.
La hermosa bahía de Sant Feliu: en la ciudad, también encontrará una bahía maravillosa, donde puede disfrutar de la espectacular vista y el sonido del mar. Ofrece muchos atractivos deportivos como vela, nadar, hacer kayak, o simplemente tomar un viaje en barco.
La Ruta del Postguerra: para aquellos amantes de la historia, Sant Feliu de Guíxols también ofrece la posibilidad de recorrer la senda de la Postguerra, un recorrido que va por ocho edificios que fueron víctimas de los bombardeos durante la Guerra Civil y fueron restaurados para que la historia perdure.
La cocina local: finalmente, la gastronomía de la ciudad es otro punto a destacar. La zona del puerto y la plaza del mercado contienen una gran variedad de bares y restaurantes locales donde se pueden degustar platos de la cocina catalana, productos frescos y de calidad como pescados y mariscos.
En resumen, Sant Feliu de Guíxols es una ciudad vecina que vale la pena explorar durante una visita a Colera. Desde la arquitectura y la Iglesia románica a la bahía, la ruta del postguerra y la gastronomía, hay mucho que explorar y descubrir en esta ciudad. ¡No pierda la oportunidad de conocerla!
