En un día caluroso de verano, muchos turistas buscan refrescarse en las playas de la Costa Brava. Pero ¿sabías que existe una playa escondida en el pequeño pueblo de Llançà que aún no ha sido descubierta por la mayoría de los viajeros? Se trata de la Platja del Port, una joya escondida que merece la pena descubrir.
Ubicada en el extremo sur de la bahía de Llançà, la Platja del Port es una playa de piedras con aguas cristalinas que se encuentran enmarcadas por un paisaje espectacular de montañas rocosas y verdes colinas. Gracias a su ubicación, esta playa ofrece un ambiente tranquilo y relajado, ideal para aquellos que buscan escapar del bullicio y el caos de las playas más frecuentadas.
En cuanto a su tamaño, la Platja del Port no es muy grande, pero esto hace que genere un ambiente más íntimo y acogedor para los visitantes. Además, sus aguas son muy tranquilas, por lo que es perfecta para la práctica de deportes acuáticos como el kayak o el paddle surf.
Al igual que otras playas de la Costa Brava, la Platja del Port cuenta con restaurantes y bares cerca de la playa.
Los turistas pueden disfrutar de la rica gastronomía catalana y de la variada oferta de aperitivos y bebidas.
Además, esta playa cuenta con una serie de servicios para garantizar la comodidad y seguridad de los visitantes, como aseos, duchas y un equipo de socorristas que vigilan las aguas durante todo el día.
En resumen, si estás buscando una playa tranquila y relajada en la Costa Brava, la Platja del Port en Llançà es una excelente opción. Disfruta de sus aguas cristalinas y de la maravillosa naturaleza que la rodea. ¡Te aseguramos que no te arrepentirás de visitarla!