Imagina esto: te encuentras caminando por una soleada y pintoresca ciudad costera en España. El sol brilla en el cielo, el aire está impregnado del aroma salado del mar y puedes escuchar su suave eco a lo lejos. Decides explorar un poco más y te encuentras con una pequeña cala escondida entre las rocas, una joya oculta de este hermoso lugar. Te adentras en ella y quedas asombrado por su belleza. Bienvenido a la conocida como Cala de Cantalars, una playa que cautiva los sentidos y transporta a sus visitantes a un paraíso terrenal.
Ubicada en Alicante, la provincia de la Costa Blanca bañada por las aguas cristalinas del Mar Mediterráneo, la Cala de Cantalars es una de las playas más queridas y buscadas por locales y turistas por igual. Se encuentra enclavada entre acantilados y rocas, lo que le otorga un encanto único y una sensación de tranquilidad.
La Cala de Cantalars se caracteriza por su arena dorada y fina, que suavemente se funde con las aguas turquesas que la rodean. Es un lugar ideal para aquellos que buscan un ambiente tranquilo y relajado, lejos del bullicio de las playas más populares. Debido a su ubicación apartada, se ha mantenido en gran medida sin explotar y ofrece a sus visitantes un rincón privado en el que disfrutar del mar y la naturaleza en su máximo esplendor.
Su tamaño relativamente pequeño la convierte en un lugar acogedor y familiar, perfecto para una escapada romántica, un día de relax en solitario o para disfrutar en compañía de amigos y familiares. A pesar de su popularidad, la playa rara vez se llena, lo que le otorga un ambiente íntimo y sereno.
Un aspecto que hace que esta playa sea tan especial es su famoso „Charco de las Serpientes“. Este pequeño estanque natural de aguas cristalinas, formado entre las rocas, es un lugar ideal para relajarse y disfrutar de un refrescante baño. El nombre puede resultar intimidante, pero no temas, su nombre se debe a las especies de plantas acuáticas que crecen en él, no a las criaturas peligrosas.
Si bien la Cala de Cantalars carece de instalaciones modernas como bares o tiendas, esto solo añade a su encanto natural y permite que los visitantes se conecten plenamente con la naturaleza que los rodea. Sin embargo, ten en cuenta que es recomendable llevar agua y comida contigo para asegurarte de no pasar hambre o sed durante tu visita.
Para llegar a esta paradisíaca playa, puedes optar por recorrer un sendero costero desde Alicante que atraviesa hermosos acantilados y ofrece vistas panorámicas al mar. Otra opción es tomar el autobús local que tiene paradas cerca de la Cala de Cantalars. Si conduces, encontrarás aparcamiento gratuito en las inmediaciones.
En conclusión, la Cala de Cantalars es un tesoro escondido en Alicante, ofreciendo a los visitantes una playa idílica y tranquila para disfrutar del sol, el mar y la serenidad. Envuelta en hermosas formaciones rocosas y bañada por el Mar Mediterráneo, esta playa es perfecta para aquellos que buscan desconectar del ajetreo de la vida cotidiana y sumergirse en la belleza natural que ofrece la Costa Blanca. Así que no pierdas la oportunidad de visitar esta maravilla y descubrir su magia por ti mismo.
