En una mañana soleada de verano, muchas personas se dirigen a la costa en busca de un lugar para relajarse y disfrutar del mar. Algunos prefieren la tranquilidad de una playa pequeña, como Cala Belladona en Calonge, Provincia de Girona.
Cala Belladona es una pequeña playa de arena situada en la Costa Brava en la provincia de Girona, a unos 20 minutos en coche de la ciudad de Palamós. Esta playa se encuentra en una zona un poco más aislada de la costa, lo que la hace ideal para aquellos que buscan un refugio más tranquilo y pacífico.
La playa de Cala Belladona es conocida por su belleza natural. Está rodeada de dos acantilados que se inclinan hacia el mar y están cubiertos de vegetación mediterránea. Debido a su aislamiento, la playa también conserva una biodiversidad rica y diversa. Además, la limpieza del agua y la playa es casi insuperable.
La playa tiene una longitud de 80 metros y una anchura de unos 10 metros. Es ideal para aquellos que buscan un respiro de la multitud en las playas más turísticas.
Aunque no tiene un salvavidas, el agua es en su mayoría tranquila, lo que la hace segura para nadar. Es perfecta para hacer snorkel y explorar la diversidad marina, pero los buceadores deben tener en cuenta que el fondo mar que no tenga muchas profundidades.
Cala Belladona es una playa para aquellos que buscan intimidad y tranquilidad, por lo que no hay infraestructuras turísticas ni servicios como restaurantes ni chiringuitos. Tampoco cuentas con alquileres de tumbonas ni sombrillas, por lo que deberá traer sus propias comodidades.
En conclusión, Cala Belladona es una hermosa playa para aquellos que desean disfrutar de un lugar tranquilo y natural en la Costa Brava. Debido a su ubicación aislada, la playa es perfecta para aquellos que quieren desconectar y disfrutar de la naturaleza. Sin embargo, tenga en cuenta que no hay servicios turísticos y que tendrá que llevar sus propias comodidades.